viernes, 22 de mayo de 2015

APUNTES DE PSICODRAMA PARA NUESTRA VIDA (II)

APUNTES DE PSICODRAMA PARA NUESTRA VIDA (II)

La semana pasada hablábamos sobre los orígenes y la definición del psicodrama. Hoy me gustaría compartir unos conceptos básicos que podemos integrar a nuestra vida cotidiana, basándome en las ideas de José Agustín Ramírez.  Dichos conceptos son los de “espontaneidad” y “creatividad” Comencemos por el concepto de “espontaneidad”, que se ven reflejados en nuestra sociedad. Este sería un proceso que se da cuando el individuo integra su cuerpo, sentimientos, emociones, pensamientos, imaginación y voluntad en sus respuestas a diferentes situaciones. Jacob Moreno, el creador del psicodrama distingue cuatro tipos de espontaneidad:
-          El primero es aquel que reactiva las conservas culturales y los estereotipos sociales y da una cualidad dramática a la acción; es la espontaneidad que da novedad y vivacidad a los sentimientos, a las acciones y a las palabras, aunque no sean algo nuevo ni original. A esta la llama “dramática” y la considera “cosmético de la psique”. El segundo es aquel tipo de espontaneidad que crea algo nuevo rompiendo los moldes de las conservas culturales y engendrando nuevas formas de expresión, nuevas ideas y sentimientos. El que tiene esta espontaneidad creadora se esfuma continuamente por vivir experiencias nuevas dentro de sí mismo y cambiar el mundo que le rodea dándole nuevos modos de sentir, pensar y obrar.
-          El tercer tipo de espontaneidad se denomina “Espontaneidad de originalidad”. Se basa en una conserva cultural, pero añadiéndole nuevos rasgos que expresan la situación actual del sujeto. Esto se observa en los dibujos de los niños y en las poesías de los adolescentes, cuando no sólo son repeticiones de lo aprendido
-          El cuarto tipo de espontaneidad se ve en las respuestas adecuadas a situaciones nuevas. Es la adaptación plástica de las habilidades y propias, la movilidad y flexibilidad del ser que se adapta rápidamente al medio y estímulos que lo circundan.


Estas cuatro clases de espontaneidad se entrelazan y complementan en una persona que haya adquirido un alto grado de espontaneidad. Una sola forma produciría una reacción sesgada. Moreno al observar a los niños comenta: “por un tiempo parecería que la espontaneidad iba a hacer de la inteligencia, la memoria y las fuerzas culturales, escalones que le sirviesen al niño en su desarrollo personal. Pero después queda sometida a estereotipos sociales y culturales rígidos y potentes que dominan las situaciones humanas. A medida que el niño crece en este ambiente, la espontaneidad es una función olvidada.

Después tenemos el famoso concepto de “creatividad”, que es definido como un efecto de la espontaneidad y se manifiesta en las respuestas adecuadas aun cuando sólo una parte de ellas sea nueva o la respuesta establezca algo nuevo para el individuo, no para el resto del mundo. La creación acompaña al hombre espontáneo en subida diaria, en sus obras ordinarias, en su enfrentamiento con todo su será las situaciones nuevas o viejas que se le presenten en la vida. Moreno hace constante hincapié en la integración del hombre en su totalidad –cuerpo, sentimiento y pensamiento.

Alessandro D’Amico

Psicólogo
@alessdamico



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